Mi yo.
Me doy cuenta que es sin fondo el entendimiento de mi existir. Cambia, crece, ¿cómo es que la misma existencia tenga tanta profundidad y perspectivas estando siempre en el mismo plano físico?
Lo que crece es mi mente, mi madurez, mi conciencia y mi integridad.
A veces en aquella manía, regreso y planteo pensamientos antiguos, incluso de niña y los evaluo bajo mis nuevas perspectivas, bajo mi nuevo entendimiento.
Algunos pensamientos viejos, que en su momento fueron mis orgullosas conclusiones, ahora me generan gracia algunos ternura de alguna ignorancia o pureza de pensar pasada.
Mis ideas del amor, de los miedos,