Saturday, May 7, 2016

Indulgencia: al borde de la dependencia

He pasado semanas siendo una mujer independiente.
Con heridas casi sanas.
Sin lagrimas al hablar de nadie.
Sintiéndome una mujer fuerte. 

Sin embargo, aunque siento que mi honor esta intacto.
Veo que mi corazón no.
Ha sido una noche dura.
[extraño poder decir una noche hermosa o una noche fantástica] 

Ahora que veo el amor con otra perspectiva ya no sé dónde cabe la ilusión.
La ilusión de una primera cita, 
Ahora parece que me quiero proteger y frenar cualquier tipo de emoción pues uno no se puede hacer expectativas. 

Sólo sentí una vez estar con alguien que me hace brillar los ojos de felicidad y valorar cada momento. 

Me doy cuenta que no he estado con la persona indicada y que eso hace sufrir si se permite.
No puedo ponderar mi valía por la falta de atención de un egoista. Es como cuestionarle a un ciego si ama la torre Eiffel.

¿ Cómo puedo olvidarme de mí en un instante?
De mi fortaleza. De todo lo que gané. Aunque no es que lo haya olvidado es que mis emociones de necesidad de afecto la opacan.

Creo que tampoco quiero tener un día de no ser madura y consecuente conmigo misma. Debo saber quién soy y poner emociones a un costado. 

Si siento que di un paso a un costado. 
Pero definitivamente la incapacidad de otro de ver mi valía no valen la pena. 
Lo único que importa es cuánto yo me quiero. Debo recordar eso.

Tal vez también me siento decepcionada por ello pensé que sabía lo q hacia pero ni yo sé tratarme a mí. Ya no soy impulsiva pero sigo haciendo lo que quiero vs lo que me conviene.

Ahora lo tendré más en cuenta. Y definitivamente me agrada no haber dado un paso mayor. El solo un estupido y yo esperanzada.

Tal vez solo fue la compañía. Nisiquiera sentía la necesidad, solo se creó el deseo. Punto. 
Ahora no hay compañía y se extingue el deseo y tomare decisiones en base a mi conveniencia porque no soy cualquier mujer.

Sé que valgo oro. 

Tuesday, May 3, 2016

Mi naturaleza




El tiempo te entierra
como arena movediza te hundes en el subsuelo
Me gusta
pues contigo se va mi dolor

No mas languidecer en lo maladaptativo
Es la segunda fase de mi libertad.
Ahora es un sentimiento diferente, de emancipación. 
Donde ya no sólo vivencié el contraste de volver a ser yo, cansada de cargar con lo que arrastra.
sino que SOY YO y me aferro a mí.
A mi independencia afectiva
A mi firmeza y valor de mujer y ser humano

No necesito perder el tiempo con nadie que me supla afectos que yo misma puedo suplir.
Rompí con el círculo.
No sabía que desprenderme de los apegos emocionales ya sea por baja autoestima o hábito
También dependía de mi disposición por madurar.

No más shares de que si te quieren o no, cómo es, cómo se siente, cómo identificar... etc

Replanteo mi atención a cómo me quiero yo.
Replanteo mi medición de amor a lo que hago por mí.
Reformulo el gastar mi atención en deficiencias en buscar formas de bienestar y superación personal.

Esta es la verdadera INDEPENDENCIA.
Soy LIBRE. Lo había olvidado por las cadenas de los apegos afectivos y dependencias que vinieron año tras año. Me acostumbré a que me llenen de amor y me olvidé cómo era llenarme yo de el.

Siento paz y sobretodo siento orgullo de la mujer que soy.